Tourist Trap

Hola, soy Chuck Connors, y tu no. Suena a chiste, pero es que Tourist Trap (Trampa para Turistas, 1979) basa gran parte de su estatus de película de culto de terror en dos grandes pilares, y uno de ellos es Chuck Connors, quien está genial y sostiene por si solo el espectáculo.

El otro pilar es el genial Pino Donaggio, quien ya se había doctorado para la causa tras las geniales Don’t Look Now (1973), Carrie (1976) y Piranha (1978). Pero empecemos por el principio… Connors, Chuck Connors, con licencia para todo.

Tourist Trap, la Película (Tate quieto que te fulmino)

Hay películas que tienen la vitola de clasicismo y solo es el momento en el que las ves cuando descubres el por que si (y a veces el por que no, que demonios). Tourist Trap es un eficaz y demencial viaje al terror bizarro de la mano del director David Schmoeller, quien además escribe el guión, rodándose la película en 24 días.

El argumento, si bien entronca en el entramado clásico de adolescentes con ganas de marcha (aquí algo más inocentones) que encuentran lo suyo, se aleja diametralmente cuando nos propone al villano de turno, mejor perfilado y con más profundidad que la planicie que abundaría en éste tipo de cine,  eso si, sin pretensión alguna y de una forma demencial y enfermiza, tanto que finalmente aceptas y das por bueno todo lo que ves, porque la propuesta, arriesgada por si sola (con un cocktail que incluye poderes telequinéticos, figuras de cera humanas y un villano tan encantador como psicótico), funciona bien sin hacer excesivos actos de fe.

El museo de Slausen, lleno de figuras de cera como reclamo para turistas (trampas, dicen los más jóvenes), esconde un inquietante secreto en la casa de al lado, relacionado con Davey, hermano del propietario del museo, el señor Slausen. Molly, ojito derecho de Slausen, y sus amigos, acabarán descubriendo mal y tarde el secreto del museo de Slausen, pero quizás sea demasiado para escapar de la muerte… y sino, incluso de la locura…

Chuck Connors lo borda (especial atención a esa belleza que era Tanya Roberts, una de las famosas Ángelas de Charlie), y la factura de la película, eficaz sin más, con algunos momentos delirantes (y hasta cómicos), apoyan el conjunto total, sustentado sobre un gran trabajo musical de Pino Donaggio.

En el momento de su estreno no cosechó el éxito esperado, aunque se convirtió en un fenómeno de culto en los años posteriores con los pases por televisión, ganando en reconocimiento y prestigio.

Pino Donaggio – Experto en todo tipo de Terrores

En pleno rodaje de Piranha con el amigo Joe Dante, el director David Schmoeller se aproximó al italiano para proponerle trabajar en Tourist Trap, aceptando el compositor el reto (dicen que el caché del compositor fue un sexto del presupuesto de la película).

Donaggio, con un curriculum corto pero experimentado, donde destacaba el gran éxito de crítica y público de la magistral Carrie (que le proporcionaría un ticket para comenzar una dilatada colaboración con el director Brian De Palma) se lió el petate y se puso manos a la obra con una excelente partitura que se establecería como una de sus obras de referencia de sus comienzos, demostrando tener tanta mano para las bellas melodías como para la tensión y el horror.

No obstante, a pesar de su excelente trabajo, dicen las malas lenguas que el productor, Irwin Yablans, habló fatal de la partitura, aludiendo que lo que él deseaba era un trabajo sintetizado en la misma tradición que el que hiciese John Carpenter para Halloween (1978), con un tema central inolvidable. Paparruchas, vamos, porque el trabajo de Donaggio es magnífico.

El cruce con Schmoeller, por otro lado, le supondría al italiano colaborar en dos trabajos más del director, donde destacan el ochentero Crawlspace (El Ático, 1987), con un excelente tema central, y Catacombs – Curse IV: The Ultimate Sacrifice (1988).

Tourist Trap – Bloques Temáticos

Como buen artesano que es, Pino ofrece varios bloques temáticos que dan color a la partitura, donde destaca su bello tema de amor, un excelente apunte melódico que ofrece variaciones a lo largo de la partitura, adoptando en varios momentos apuntes dramáticos o de urgencia.

Reeditada por la Full Moon Records, con un track list de 25 cortes, da la sensación de que el orden de los cortes se altera a partir del cuarto corte, donde deja de corresponderse muy bien con lo que vemos en la película, recuperando el orden a partir del corte 11, donde ya comenzaría a corresponderse con lo que si sucede en pantalla. Entre el cuarto corte y el quinto fusiona varios momentos; In the Pool, Love Theme/Shrine, Effetti Moog E Voci, Davey’s Waltz, The Chase, Eileen’s Death y Love Theme/Wife irían todos un poco alterados.

Por ejemplo, el tema 5 sería Effetti Moog E Voci, el comienzo, donde un sintetizador nos muestra el tema de amor, posteriormente seguido de la voz que representa al tema de los maniquíes, justo seguido del corte Davey’s Waltz, un bonito corte donde las cuerdas, el piano, la flauta y el sintetizador construyen un excelente tema melódico. El corte 6 se correspondería con The Chase, y el 7 con la muerte de Eileen.

Dicho ésto, vamos al análisis de los bloques temáticos:

• Tema de Amor: El tema que Donaggio vertebra para la historia de amor de la mujer de Slausen es un motivo que Donaggio borda a la perfección. Dulzura y suavidad, para explicarnos la historia de la mujer de Slausen, a través del sonido de una cajita de música,como en el tema Love Theme/Shire (donde conocemos el santuario de Slausen), o bellamente ejecutado en los End Titles, donde la flauta enuncia al tema central, sin olvidarnos de la genial y magistral danza macabra del final, Dance / Going Home. Incluso se atreve a interpretar el tema de amor con los sintetizadores moog (Effetti Moog e Voci), y nos ofrece también una versión asfixiante y dramática en la segunda parte del corte The Fight / Revelation, o en In the Water.

• Tema de los Maniquies: Las voces femeninas, a modo a veces de respiraciones agitadas, susurros lastimosos o incluso cuasi gritos, configuran un tono temático interesante que configura presencia a los maniquís de la casa de Davey, otorgándoles un matiz y un contexto humano, casi aterrador. Hay multitud de temas, breves pero originales, que adoptan este perfil, como el Mannequins on Guard, Mannequins o The Mannequins Come Forth. Un brillante recurso musical del italiano que se ve reflejado en cortes como la muerte de Eileen (Eileen’s Death), donde el motivo de los maniquíes se configura en un tenso brazo ejecutor mortal, o en el desarrollo de A Visit to Davey’s House, donde Donaggio nos vuelve a recordar del peligro silencioso de estos «seres». Especial mención al clímax final, concretamente a la última escena, que luego analizaremos

• Tema de misterio: Este es protagonista especialmente en los primeros cortes, The Back Room (un corte brillante y tenso, excelentemente ejecutado con unas cuerdas asfixiantes  y un piano vigoroso, muy Donaggio, donde asistimos a la primera muerte de la película) , Someone’s Watching o In the Pool, donde la clave (similar al clavicordio) introduce un motivo de misterio, siempre una amenaza en la sombra, avisándonos de que algo no va bien. El piano también lo introduce con un ritmo tenso y apresurado en Hearburst, donde luego las cuerdas ejecutan otra muerte, la parada cardiaca de una de las protagonistas.

• Tema de Urgencia: por llamarlo de algún modo, sería el relativo al peligro que realmente si se cierne, un motivo con el que el italiano nos golpea para aterrorizarnos, como en The Chase, donde las cuerdas son el instrumento principal, violines y contrabajos. The Fight/ Revelation es otro interesante momento, solo en su apertura, donde las cuerdas anuncian la pelea con un tono fatalista para Jerry, quien sale perdedor ante el poderoso psicópata.

Mención especial para el hermaniano tema Dreamwake, breve pero precioso corte donde el arpa y las cuerdas construyen un tema etéreo y muy sugerente, propio del mísmisimo Bernard Herrmann.

Tourist Trap – Main Title

Mención aparte merecen dos temas de la partitura, la apertura y el clímax final. En los Main Titles, Donaggio marca el tono de la partitura, donde unas percusiones juguetonas y una flauta de émbolo construyen los main titles sobre fondo negro, donde los violines rompen el sonido juguetón para marcarnos el motivo de urgencia o peligro, asomando el tema de misterio construido sobre el piano (Donaggio nos introduce ya los dos temas con los que construirá el tour de force de terror musical).

El uso de la flauta de émbolo, instrumento de viendo madera que no tiene orificios para interpretar las notas, se interpreta con un pistón que regula la columna de aire, permitiendo conseguir un sonido muy característico con glissandos ascendentes y descendentes, sonido que consigue Donaggio con el uso de esta flauta.

De hecho, incorpora un toque entre juguetón-infantil y divertido, y no es poco intencionado; esta flauta es utilizada en la educación musical de los niños, y muy típica y usada, además, en el cine (la famosa escena del salto del coche en The Man with The Golden Gun), y sobre todo en los dibujos animados (muy típica de los «cartoons» de la warner, por ejemplo).

En definitiva, para el que escribe, una de las mejores y más originales creaciones del italiano.

Tourist Trap – Dance / Going Home (Spoiler)

Para los que no hayan visto la película, que ya deberían si estaban interesados, advertidos van de que no sigan leyendo.

El clímax final de la película, todo él, viene representado en este brillante corte, muy del italiano por el broche de cierre como veremos, donde Donaggio hace una recopilación temática de todo lo ofrecido.

Para empezar, abre con la juguetona e infantil percusión del inicio, que da paso a una excelente Waltz donde abre el carrusel musical el tema de los maniquíes, para dar paso posteriormente a la entrada del motivo principal, el tema de amor, donde los vientos y las cuerdas se lucen sobremanera, sumándose puntualmente el tema de los maniquís, que como espectadores asisten al baile entre Slausen y un maniquí que parece representar a su esposa, desvelándose lo que ya sabíamos, que estamos ante un psicópata con poderes telequinéticos al por mayor. El tema de misterio y peligro asociado a Slausen aparece mediante el piano antes del bizarro final, donde, en pleno baile, Molly, única superviviente del museo de figuras humanas de Slausen, a punto de entrar en la completa locura, agarra un hacha y se lo estampa al psicópata en pleno cuello, quien agonizando cae al suelo, mientras Molly huye.

En la siguiente escena, vemos a Molly conduciendo en coche con una sonrisa de oreja a oreja, completamente ida, y las cuatro figuras de sus amigos como copilotos, una escena demencial acompañada de una explosión orquestal made in donaggio; el golpeteo de campanas es acompañado de una frenética sección de cuerda y vientos metales que configuran un clímax final violento y agitado de tono pesadillesco a través del tema de los maniquíes que, para los que amamos la música de Donaggio, reconocemos inmediatamente como huella suya, un recurso ya utilizado en Carrie y que recuperará en posteriores trabajos como Dressed to Kill (Vestida para Matar, 1980).

Una genialidad.

En Conclusión

Tourist Trap marca el comienzo de la extendida madurez del compositor; una obra redonda y sin fisuras, ejemplar, que debería figurar entre las mejores creaciones musicales de Pino Donaggio, tanto por variedad temática como por ajuste con las imágenes, siendo una gran desconocida por el gran público.

Obra musical a reivindicar pues, y que debería mostrarse a muchos jóvenes compositores de hoy día para que la descubran y entiendan lo que es crear y componer buena música de terror y tensión.