King Kong

Anunciado por la Paramount, y de la mano del famoso mega productor italiano Dino de Laurentiis, a mediados de los 70 se proclamaba a bombo y platillo una nueva versión (más actualizada) del gorila más famoso del celuloide.

La película se armó de una fuerte propaganda publicitaria, anunciándola como “La más excitante y espectacular película de todos los tiempos”, y donde la estrella principal (King Kong) sería un gorila, enteramente mecánico y construido por Carlo Rambaldi (creador del mítico E.T. o la cabeza del Alien).

Compositor: John Barry.

Año: 1976.

Cómprala: si quieres disfrutar de un trabajo oscuro y misterioso, pero que ofrece uno de los temas más bellos que haya compuesto Barry.

No la compres: Si eres un completista y prefieres esperar a que algún día salga una edición expandida.

NUESTRA NOTA

La tarea de dirigir este ambicioso proyecto recayó en John Guillermin, director de la famosa The Towering Inferno (1974), después de tantear nombres tan importantes como Roman Polanski, Michael Winner ó Sam Peckinpah, accediendo si se contaba con una cabeza a escala real del gran simio y un brazo mecánico capaz de soportar el peso de la chica. Para el resto de escenas donde aparece el gran gorila se ayudaron de un traje creado por el gran maquillador Rick Barker, con la desafortunada anécdota acerca de las palabras del hijo del productor, quien declaró que querían dentro del traje a un hombre de raza negra porque “los negros están mas cerca de los primates”.

Para protagonizarla se contó con Charles Grodin, René Auberjonois, Jeff Bridges y una debutante llamada Jessica Lange, modelo de profesión, que consiguió desbancar a nombres de la talla de Barbra Streisand, Cher o Bo Derek.

La Película

En busca de lo que parece un depósito natural de petróleo, la Compañía Petrox inicia una expedición al oeste de Sumatra para explotar este yacimiento. A la cabeza de esta aventura se encuentra un cargo de la compañía, Fred Wilson (Charles Grodin) que esta tan seguro de su suerte que promete que volverá con “algo grande”. Cuando zarpa el barco a la isla consigue colarse Jack Prescott (Jeff Briges), un paleontólogo que intenta frenar la explotación de los recursos naturales que pretende realizar la compañía.

Al ser descubierto, Prescott, es llevado a las bodegas, pero cuando pasan por la cubierta avistará un pequeño bote salvavidas. En el se encuentra Dwan (Jessica Lange) la única superviviente de un barco que exploto y que apenas se acuerda de lo sucedido.

Al fin consiguen llegar a la isla pero con la ingrata sorpresa para Wilson de que no hay petróleo, sino un gigante muro hecho por los nativos de Isla Calavera que protege a una especie de dios llamado Kong. La tribu consigue raptar a Dwan para ofrecerla a su gran deidad, que es un gorila de gran tamaño, y que se la lleva como trofeo al interior de la jungla. En vista de lo sucedido la tripulación del barco decide ir a rescatar a Dwan y de paso capturar a Kong para no volver a EEUU con las manos vacías.

Conseguido el propósito de Wilson, el gran gorila es llevado a Nueva York para ser presentado por todo lo alto, como publicidad de la Compañía Petrox, pero Kong consigue escapar de sus captores sembrando el terror en la Gran Manzana. Después de destrozar media ciudad, Kong acaba en lo alto de las torres gemelas del Wolrd Trade Center donde será abatido por la Guardia Nacional.

Aunque el remake difiere en muchos puntos al clásico de 1933 la película consiguió ser un éxito de taquilla, que ayudo a lanzar las carreras de Jeff Briges y Jessica Lange y originando una secuela 10 años después con el nombre de King Kong Lives protagonizada por Linda Hamilton y que no conto en tareas de composición con John Barry, en detrimento del gran John Scott.

¿Que te vas a a Encontrar?

FSM rescata, bajo su sello Silver Age Classics, los 43min de un trabajo que fue editado en su momento (con una dudosa calidad) de la mano del sello Mask.

Un gran trabajo de John Barry donde ofrece el contrapunto al score que ofreció Max Steiner en 1933, en el cual predominaba un aire más espectacular, con una partitura orquestal que por momentos ensalza el toque romántico que quiere transmitir la historia (en lo cual era uno de los compositores más experto en la materia), aunque Barry opta más por una composición en el que predomina un halo siniestro y oscuro, con los recursos típicos del maestro que escuchamos en el resto de sus obras.

Ahora sí que se puede anunciar como el primer CD oficial del score de King Kong, en el que se ha mejora notablemente su calidad de su sonido, al recuperar las cintas originales en stereo, y que además incluye una gran cantidad de notas y material de producción en el folleto que contiene en su interior.

El Score

Aunque Barry había colaborado con el director John Guillermin en la película Never Let Go (1960), una de sus primeras composiciones para el cine, el motivo de su contratación fue el productor Dino de Laurentiis. Su estilo inconfundible y su gran clase a la hora de componer música romántica era la idea que tenía en mente el productor italiano para este remake.

Pero antes de que empezase el rodaje, Barry ofrece su idea para el score en el corte The Opening. Un tema que se aleja de lo que se esperaba que Barry ofreciese y donde se decanta por un corte con un tono más misterioso.

Ese principio oscuro que da paso al imponente arranque de vientos resulta casi amenazante, y continúa con lo que parece ser el inicio de una melodía romántica, aunque solo se queda en un mero espejismo. El corte prosigue con una melodía con un aire casi sobrenatural, remarcado con el uso de un órgano, y que a través de un crescendo final (con toda la orquesta) acabará resaltando el peligro.

Este alo de misterio, con el que arranca la partitura, continúa en el resto del score, escuchándolo en temas como Arrival on the Island (que aunque parezca una melodía agradable, el uso del órgano consigue un aire místico), Full Moon Domain / Beauty Is as Beast (consiguiendo ese efecto gracias al uso de los vientos) o Blackout in New York / How About Buying Me a Drink, que por momentos puede llegar a encajar perfectamente como tema para una de sus partituras en la saga Bond.

Destacable es el tema Sacrifice – Hail to the King, cuando la tribu ofrece a Dwan a Kong, donde Barry usa ritmos tribales, que los nutre con percusión y de voces que recuerdan casi gritando el nombre del gran gorilla. El uso de las cuerdas y un instrumento de viento estridente van ayudar a ir generando un clímax de intranquilidad y de tensión que se corta en su momento álgido por el rugido y golpes de pecho de Kong y el grito de Jessica Lange. Pasados unos segundos de silencio vuelve a arrancar con los cantos: “Kong, Kong,…” y se une toda la orquesta para finalizar de una forma imponente.

El mismo tratamiento recibe el tema Breakout to Captivity cuando esta vez se cambian las tornas y es la expedición la que captura a Kong. El uso de la misma percusión tribal y ese clímax de tensión que va generando la orquesta también se corta en su momento más álgido con los ruidos de Kong precipitándose en la trampa que le han preparado. Después de conseguir la captura de Kong, la calma queda presente con un tema muy suave a partir de cuerdas y vientos

El año a la cual pertenece la película se ve reflejado en el corte Kong Hits the Big Apple con un tema muy setentañero que puede resultar casi cómico con ese punteo de guitarra, pero que en su parte final se fusiona con la partitura.

Poca acción encontramos en el score y únicamente esta reflejada en el corte The End Is at Hand donde aparece un ritmo machacón, muy característico de Barry, con el piano y las cuerdas, uniéndose posteriormente la percusión. para ir poco a poco in crescendo hasta un final que resulta dramático.

El desenlace final lo encontramos recogido en el último corte del CD, The End, en el que Barry usa una melodía muy suave a partir de cuerdas, en la que se intercala lo que parecen ser los latidos de un corazón. Poco a poco ese sonido va decelerando el ritmo hasta que se detiene, emergiendo el tema de Kong de una forma trágica, con un desenlace musical de gran intensidad dramática. Cuando acaba esta melodía, el corte da paso al precioso motivo de Dwan, a modo de End Credits de la película.

La Bella y la Bestia

Al margen del score, mientras se escucha el CD queda claro quiénes son los dos protagonistas principales en esta historia, y como cada uno de ellos tiene reflejado su tema particular, fácilmente reconocible por su tratamiento:

Para Kong

Barry no ofrece un tema definido si no que opta por ofrecer una serie de motivos que son de carácter oscuro e imponente, ayudados principalmente por el uso de los vientos y el resto de la orquesta, que intentan emular la magnificencia del gran gorila. Podemos escucharlo en cortes como The Opening, Incomprehensible Captivity o Climb to Skull Island (en estoss dos últimos cortes, el tema de Kong tiene un aire más trágico conforme se produce el desenlace).

Para Dwan

Compone un tema como solo Barry sabe hacer, y donde demuestra la dulzura o inocencia del personaje, con ese sonido embelesador de las cuerdas, tocando la melodía de Dwan, y el acompañamiento de los vientos o cuerdas, disfrutándolo en cortes como Maybe My Luck Has Changed (que aun siendo pura ternura musical nos recuerda en sus últimos 5 segundos que es una película de Kong), Blackout in New York – How About Buying Me a Drink y sobretodo en el corte Arthusa, (una autentica delicia para nuestros oídos), siendo este último uno de mis preferidos. En este tema refleja a la perfección como Kong disfruta de Dwan, e incluso siente atracción por su trofeo, emergiendo la preciosa melodía de la chica con el acompañamiento del piano haciendo eco, que resulta ser uno de lo temas más sugerentes que haya compuesto Barry, consiguiendo un resultado casi erótico.

La relación que surge entre Kong y Dwan origina que ambos temas aparezcan intercalados, como es el caso de los cortes Full Moon Domain / Beauty Is as Beast donde el tema de Dwan suena de una forma inquietante hasta que aparece violentamente el tema de Kong (quien la salva de una gran serpiente), en Incomprehensible Captivity (el injusto cautiverio de Kong y la visita fortuita de Dwan da pie a que Barry junte ambas melodías dándolas un carácter dramático y que resalta el sufrimiento de ambos personajes) o Climb to Skull Island, donde nuevamente aparece el tema de Kong de forma dramática, escuchando, únicamente en su parte final, unas pinceladas del tema de Dwan.

Conclusión

Resulta una autentica pena que, en la primera edición oficial del score de King Kong, no se haya podido editar más música y todo ello a causa de los derechos de la misma obra que están en manos de diferentes familias.

Un ejemplo de lo dicho es que no se pudiese incluir los cortes musicales que acompañan a las escenas en las que:

• Prescott divisa desde el barco la lancha salvavidas en el que esta Dwan.
• A bordo de una lancha atraviesan el banco de niebla que protege la Isla hasta llegar a su playa.
• La expedición se adentra a la jungla para buscar a Dwan.
• Kong esta con Dwan en su refugio.
• Cuando Kong arroja al vacio el árbol en el que estaba prácticamente toda la expedición que iba a salvar a Dwan.
• Prescott y Dawn escapan de un Kong enfurecido después de que el gran gorila matase a una enorme serpiente.
• Dwan y Prescott se besan por primera vez.

Y si se quiere ser mas completista, tampoco se incluye una versión cantada del precioso tema de Dwan a manos de Andy Williams y con el nombre de Are You in There?.

Pero al margen de los problemas legales que hay de por medio, el aficionado puede disfrutar de un score importante en la excelsa filmografía del Barry y que resultó ser uno de sus trabajos más difíciles, hasta el punto que para poder cumplir el plazo de entrega programado Barry tuvo que ir completando la partitura al tiempo que se le entregaban las tomas que se iban rodando.

Lista de Temas

1. The Opening 2:14
2. Maybe My Luck Has Changad 1:48
3. Arrival on the Island 2:43
4. Sacrifice – Hail to the King 7:06
5. Arthusa 2:18
6. Full Moon Domain – Beauty is a Beast 4:22
7. Breakout to Captivity 4:06
8. Incomprehensible Captivity 2:52
9. Kong Hits the Big Apple 2:33
10. Blackout in New York – How About Buying Me a Drink 3:20
11. Climb to Skull Island 2:26
12. The End is at Hand 1:41
13. The End 4:24

Total Time: 42:30