FSM: El Ocaso de los Dioses

Escrito por , el 16 septiembre 2011 | Publicado en Apuntes

250 CDS son el techo al que llegará FSM, ni más ni menos. Y con el doble CD de Nathan Van Cleave, que incluye The Space Children (1958) y The Colossus of New York (1958), Lukas Kendall afirma que tan solo quedan nueve CDS para llegar a la cuenta atrás, al San Se Acabó (entre las que se encontrarán, según ha dicho, varias sorpresas… ¿Gremlins ala vista?).

Se acabó lo que se daba, lo cual no quiere decir, como ha comentado Lukas Kendall, que no se dedique a esto de la música de cine: seguirá ayudando a sacar a la luz bandas sonoras, produciendo y coproduciento multitud de títulos con otras discográficas, pero no ya bajo el título de FSM. Y por supuesto, mantendrá el foro y la web de FSM.

Pero este proyecto que empezó a rodar en 1999 (doce años atrás) llega a su fin, y Kendall se ha deshecho en elogios hacia todos los compradores habituales de FSM, y especialmente, hacia Craug Spaulding, el jefazo responsable de SAE, y quien distribuye los CDS de FSM desde 2004, cuando Kendall le preguntó si estaba interesado en gestionar todo el stockaje de su sello discográfico.

Muchos CDS se están agotando porque las tiradas van llegando al número mágico de limitados (como el caso de McQ, The Egyptian o Demetrius and the Gladiators), y otros, por razones contractuales, podrían llegar a agotarse por expirar la licencia. Pero todos aquellos que no cumplan ninguno de estos requisitos, permanecerán en stock hasta que o se vendan, o expire la licencia. Y Kendall ya ha anunciado una serie de ofertas especiales a lo largo de los meses venideros.

Como bien dice Kendall, ha sido una experiencia tan maravillosa como fatigosa, por lo que ha decidido cerrar el chiringo y reorientar su experiencia hacia otros caminos, ayudando a otras discográficas como pueden ser Intrada o Lalaland Records (cosa que ya hecho con un gran éxito en el pasado, sin olvidarnos de su impecable labor para las remasterizaciones y ediciones completas de la saga Bond).

Desde aquí solo podemos felicitar la labor de un hombre y de todo su equipo (los integrantes de FSM), que han hecho la que puede ser, sin ningún género de duda, una de las labores más encomiables en cuanto a edición y promoción de la música de cine, rescatando títulos de todo género y época sin ningún tipo de ánimo comercial (incluso perdiendo en algunos casos), y con unos folletos informativos formidables, los mejores que he visto/leido en mi vida. Dicho en otras palabras, fabricando magia, haciendo que muchos sueños de los aficionados se hicieran realidad.

Gracias Lukas.