Análisis
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Género
Comedia, Romántico
Lo mejor
Si te gustó el filme y te enamoraste tanto de la historia como de la música
Lo peor
Que te aburrieses con la película y no te gusten los rollos romanticones ni la música italiana

Avanti!

1972

Wendell Ambruster es un rico hombre de negocios americano que se ve obligado a viajar a Italia a repatriar el cuerpo de su padre, fallecido en un accidente de tráfico. En el viaje conocerá a Pamela Piggott, una británica con la que pronto descubrirá que tiene algo en común. A su llegada a Ischia, la bella isla italiana donde transcurre la acción, descubrirán que sus padres habían mantenido una relación durante los diez veranos que se habían ido encontrando en el Grand Hotel Excelsior. De ello, únicamente eran conocedores los propios trabajadores del hotel, Carlucci, su director, y la misma Pamela.

Para esta historia de amor estrenada en 1972 el popular director Billy Wilder contó con uno de sus actores fetiches, Jack Lemmon, en el papel del malhumorado Wendell Ambruster y con Juliet Mills, una desconocida actriz para el gran público pero muy popular en TV y teatro, en el papel de la acomplejada Pamela Piggot. Para el papel de Carlucci contó con un fantástico Clive Revill.

La película, escrita por el mismo Wilder y por su colaborador habitual, I.A.L. Diamond a partir de una obra teatral de 1968 de Samuel Taylor fue un fracaso de crítica y público en su día. El tiempo la ha puesto en su sitio y hoy es una película que se ve con tremendo agrado.

El Compositor

Pese a que Wilder había trabajado con algunos de los más prestigiosos compositores como Miklós Rózsa, Hugo Friedhofer o Franz Waxman para esta película quiso contar con alguien que conociese perfectamente tanto la cultura como la música italiana.

Carlo Rustichelli, nacido en 1916 es uno de los compositores más longevos y prolíficos del cine italiano. Autor de más de un centenar de bandas sonoras y conocido por su colaboración con reputados directores como Passolini, Pontecorvo o, sobre todo, Pietro Germi, desarrolló la mayor parte de su carrera en su Italia natal.

Fue precisamente su estrecha colaboración con Germi la que provocó que trabajase con Wilder. El director austriaco era un gran seguidor de las película de Germi.

Wilder tenía muy claro el tipo de música que quería en su película. Conocedor y amante de la canción Senza Fine de Gino Paoli quería que esta apareciese de alguna forma en su film. Además, su mujer era una enamorada de La Luna, una popular canción de Don Backy y Andrea Mariano, que también aparece versionada.

Así pues, quedaba bien claro los derroteros sobre los que iba a girar la banda sonora. Toda ella iba ser una adaptación de populares temas italianos con la sola inclusión de un tema creado por Rustichelli. Wilder y Rustichelli trabajaron conjuntamente en la preparación del score y en palabras del propio compositor italiano a una entrevista concedida a Jose María Benítez en 1992: It was great, one of the most unforgettable experiences in my entire life.

La Banda Sonora

Esta banda sonora gira en torno a tres temas. Uno de ellos será el de los dos jóvenes protagonistas y está basado en la ya mencionada Senza Fine. El tema basado en la canción Palcoscenico de Sergio Brunni, Giannini y Bonagura será el que hace referencia a Ischia y a todo lo que le rodea. Finalmente, el tema basado en la canción Un´ora sola ti vorrei de Paola Marchetti y Umberto Bertini será el que haga referencia a los padres. Estos temas se presentarán nada más empezar la película.

Comienza el viaje por Ischia: el tema de Italia

El primer tema en aparecer es el de Ischia, basado en la canción Palcoscenico. Ambruster va en el tren y empieza a sonar un tema jocoso y divertido, muy alegre que se prolongará hasta pisar suelo de Ischia. Será un tema que de bastante juego durante la película, como el momento en el que el protagonista va en el barco y sufre un mareo; el tema de repente da un pequeño parón para luego proseguir con su ritmo alocado y festivo. Ya vemos la primera intención de Wilder: tenemos que desconectar de nuestra apresurada vida de ciudad para adentrarnos en un mundo en que las cosas se hacen de forma muy distinta.

Aunque donde el tema cobra verdadera importancia y se convierte en protagonista es en la escena donde se ve al personaje interpretado por Mills pasear por Ischia. Un ritmillo bastante apresurado que bien se podría asemejar al trote del caballo sobre el que va la protagonista nos adentra en la vida y costumbres de los habitantes de la isla. La alegría, el desenfado del tema suena en todo su esplendor mientras vemos a unas mujeres subir desde sus balcones las cestas con el pescado, a unos turistas tomando un refresco en una terraza o a unos niños observar atentos a Pamela tomarse un helado. Hay una escena que me resulta personalmente muy divertida y es aquella en que aparecen unas monjas acudiendo a ver Love Story. Sin duda, un guiño cinéfilo de Wilder a una de las películas de más éxito de la época en el que la música de Francis Lai también se convierte en cómplice. También nos encontramos con un momento en que ella se acerca al muelle y hay unos pescadores que la observan. Después de una breve transición a piano empieza a sonar una armónica. Se trata del tema de la “seducción” que comentaré más adelante. Y hace referencia tanto al instante en que los chavales miran deseosos a Pamela mientras se come el helado como a esos pescadores que se ven atraídos por ella cuando pasa por delante de ellos. Pasado ese momento, prosigue el tema con su ritmo habitual. Escuchar tema → La expresión de esa vida tranquila y despreocupada de los pueblos queda perfectamente plasmada en esta escena y la música contribuye a ello. El alto ritmo del tema es una muestra de la vitalidad y jovialidad que transmite. Wilder era un enamorado de la vida mediterránea y esta escena da fe de ello.

Hay un momento sumamente divertido en que suena este tema y es durante al cena de los dos protagonistas. Concretamente en un momento en que un abuelete baila con su enfermera. El tema suena en forma de una especie de pasodoble y de nuevo nos encontramos con ese imperioso deseo de abandonarnos a los placeres de la vida, que Wilder quiere hacernos remarcar tanto en su film.

El tema de amor marca buena parte de la partitura de Rustichelli

En resumidas cuentas, nos encontramos con un tema cuya mayor virtud es la de darnos a entender que la vida son cuatro días, que hemos de disfrutar y dejarnos llevar. Y que mejor que un tranquilo pueblo italiano el que exprese este modo de vida. Además, ese carácter tosco del personaje de Lemmon quedará remarcado por un tema que es precisamente todo lo contrario. Si quiere disfrutar de los placeres de Ischia tendrá que seguir su ritmo.

Llegada al Grand Hotel Excelsior: el tema de Wendell y Pamela

Senza Fine, la canción de la que estaba profundamente enamorado Wilder es la protagonista del tema que expresa la relación entre los dos protagonistas. Es un tema que está asociado tanto a ellos dos como al hotel dónde se conocen. Es un tema muy glaumoroso y suntuoso en expresión del lujoso sitio dónde van formando su propia historia de amor. Será a la llegada de Ambruster al hotel dónde suene por primera vez, adelantándonos el romance que allí va a acontecer.

Conocerá sucesivas variaciones a lo largo del film, desde el tono evocador e idílico de la cena de los protagonistas al más sensual cuándo éstos se disponen a tomar un baño desnudos. Esta variación, sumamente hermosa introduce la voz de Edda Dell´Orso para anunciarnos con suma picardía ese instante algo transgresor, sobre todo para el cine de la época. Escuchar tema →

Resulta muy curioso la manera en como el compositor utiliza el tema en el momento de la cena, ya que mientras están discutiendo airadamente de fondo suena el tema. No deja de ser un guiño a esa situación romántica que está en ciernes y que de momento intentan tapar con estériles discusiones.

En definitiva, tenemos un tema de gran romanticismo, no tan profundo como el de los padres que comentaré a continuación ya que la suya no es una relación del todo consolidada. Su tono ligero en forma de vals nos invita de nuevo a dejarnos llevar, a despreocuparnos, algo que “deben” hacer los protagonistas si quieren averiguar quiénes eran sus padres y cómo se sentían estando juntos. De hecho, su similitud a lo que sería un vals queda fotografiada en el momento en el que la protagonista aparece bailando a su son. Representa un momento de máximo placer después de haber paseado por las calles de Ischia. Llega como “flotando” a la habitación del hotel. Comprobamos de nuevo como hay una relación entre este tema y el de Ischia: el placer y el abandonarse son sus denominadores comunes.

Sólo avanzada la película, en el momento en que se besan en la habitación de él y de alguna forma se afianza su relación el tema se volverá sumamente melódico y romántico y habrá traspasado lo meramente evocador e idílico para convertirse en un tema de amor más propiamente dicho. En este momento habrá ganado terreno definitivamente al de los padres. Ellos tendrán ya un tema propio, no impostado de segundos.

Los otros protagonistas: Willie y Kate

Resulta chocante como el director nos da a entender que los verdaderos protagonistas de esta película no son Lemmon y Mills, sino los padres fallecidos. La adaptación de la canción Un´ora sola ti vorrei expresará su romance.

A través tanto del homenaje que sus hijos le van haciendo repitiendo sus mismas acciones como de un hermosísimo tema que estará constantemente presente cada vez que se hable de ellos o que éstos “aparezcan”, Willie y kate se convierten en los otros protagonistas.

Tengo auténtica debilidad por este tema. El profundo romanticismo que de él se desprende y su tono puramente italiano hacen de él todo un homenaje no sólo a los padres y al romance que fraguaron durante años, sino a la misma Italia y al mismo amor. Esto se ve de forma diáfana al final de la película, cuando por fin son enterrados. De fondo se ve el Mar Mediterráneo. Imágenes y música se funden en el que para mí es el momento más hermoso de la película.

Otras variaciones son las del velatorio y la cena. En la primera, vemos como Pamela y Wendell velan el cuerpo de sus padres mientras el tema suena de una forma lúgubre, muy triste y afligida. Es una larga escena en que sólo a través de la música nos damos cuenta de lo importante que era esa relación. Ese tono sombrío desaparece de repente cuando Pamela corre las cortinas para que entre luz en la sala. Entonces el tema explota, se expande. Es un momento muy simbólico, como si la historia de los fallecidos inundase a nuestros dos protagonistas.

En la escena de la cena homenaje a los padres encontramos de nuevo el tema pero está vez cantado por un componente de la banda que está tocando en ese momento. El mismo menciona que era el tema favorito de Kate. De nuevo, una escena de gran romanticismo en la que el tiempo se para para rendir tributo a los dos desaparecidos.

En definitiva, es un tema que expresa un amor consolidado durante años. Es sincero, puro como el amor que se procesaban pese a su avanzada edad.

Frente a este tema Rustichelli adaptó la canción La Luna para expresar el momento en que Willie y Kate se conocieron. Este tema podríamos definirlo como el del flechazo o la seducción. Es un tema de tono suave, lento, muy galante, como si fuera una caricia, con el que el compositor pretende describirnos cómo se formó ese romance. Aparece plenamente desarrollado sólo en una escena del film. Mientras vemos a Pamela y Wendell tomar el sol desnudos en un peñasco aparece un barco con un pescador tocando la armónica. Esto servirá para introducirnos en la escena que veremos a continuación. Tanto Ambruster como Piggot se dirigen a sus habitaciones después de haber contemplado el amanecer sobre el Monte Vesubio. La escena no contiene diálogos, sólo música, acciones y miradas. Rustichelli nos está contando sólo con música como la magia de Italia ha tocado también a nuestros dos jóvenes protagonistas, reacios al principio a tratarse. La escena termina con cada uno metiéndose a su habitación y despidiéndose a la manera como hubieran hecho sus padres: adiós Willie, adiós Kate. Es un momento de gran envolvimiento y romanticismo. El flechazo se ha producido.

Los paralelismos con la escena que antes comentaba de Pamela paseando por el muelle son evidentes: se inicia con un solo de armónica y el mar es el marco donde se desencadena la acción. La armónica es un instrumento que ha tenido muy distintos usos en la música de cine: desde expresar soledad al uso que hacía Morricone para anunciar los duelos en los spaguehtti western. Aquí se usa como arma de seducción y conquista y el mar es su aliado para exaltar ese romanticismo.

Este tema volverá a aparecer brevemente cuando Wendell intente romper unas fotos en las que Pamela aparece. De forma muy sutil los escucharemos. Es una especie de llamada de atención sobre lo que está sintiendo y se verá incapacitado de romperlas.

Temas secundarios: Bruno y Anna

El único tema que Rustichelli no adaptó es el referente al botones y a la criada del hotel.

Para Bruno compuso un breve motivo, un tanto bufonesco y misterioso. No es de extrañar pues el personaje es un tanto caricaturesco. El tono misterioso que lo envuelve no hace sino referencia a su oscuro pasado.

Frente a éste tendremos el tema de Anna, que no es sino el tema de amor entre los dos empleados. Es uno de los momentos más hilarantes de la película y en el que la música mejor se utiliza para resaltar una situación cómica. Anna está embarazada de Bruno pero él no la quiere, de hecho está dispuesto a fugarse a Estados Unidos y dejarla. Cuando ésta se entera monta en cólera y decide vengarse. Rustichelli compone un tema que empieza de forma muy ténue y misteriosa y en el que de repente se introduce una parte más musical que es tremendamente trágica a la vez que melancólica y romántica. Rustichelli pone voz a una sirvienta que, amén de ser muda, está desesperada. Resulta muy curioso como el compositor juega con la música intercalando el motivo de Bruno y un breve motivo religioso cuando ésta se va a santiguar. Todo ello convierte ese momento en una tremenda sátira en el que contrastan la seriedad de la música con lo grotesco de los dos personajes.

Conclusiones

En líneas generales nos encontramos con una banda sonora totalmente envolvente que exalta el romanticismo de la doble historia y que, con su marcado timbre italiano, homenajea al país transalpino como cuna del amor. La jovialidad, ritmo y desenfado tanto del tema de Ischia como del vals de los protagonistas invita, no sólo a los protagonistas a disfrutar y dejarse llevar por sus instintos y emociones, sino también a nosotros mismos. Tanto Wilder como Rustichelli consiguieron en mi opinión una banda sonora que se acopla perfectamente a las imágenes y a la historia y que supo captar lo que los protagonistas, vivos y muertos, sentían los unos por los otros. Destacar como curiosidad que la banda sonora fue grabada íntegramente en Roma. Wilder, que se había rodeado para realizar la película de un equipo enteramente italiano, no quería que la banda sonora fuera menos.

Amén de la música, la película incluye importantes valores como el de respetar a los padres y no prejuzgarlos por su edad. Ambruster y Piggot redescubren en Italia el amor gracias a la figura de sus padres. Por eso, los difuntos son los verdaderos héroes de esta historia. Una historia que además, satiriza sobre ese modo de vivir apresurado y cardíaco americano y que pone a un pequeña isla mediterránea como ejemplo de vida saludable. La música hará que sintamos que estamos en cada momento en italia y que lo único que vale es disfrutar del momento y si es junto a la persona que amas mejor. Por eso, cada vez que el amor te pregunte: Permesso? tú tienes que responder Avanti!

Avanti!

  1. Intro (0:16)
  2. Main Title (1:57)
  3. To Ischia (2:16)
  4. Grand Hotel Excelsior (2:37)
  5. Miss Piggot (1:23)
  6. The Morgue (4:39)
  7. Cha-cha-chá (3:18)
  8. 'A tazza 'e cafè (2:20)
  9. A Tribute To Them-dinner (2:49)
  10. Sunrise Over Mount Vesuvius (3:25)
  11. Willie & Kate (3:21)
  12. Bruno's Theme (0:32)
  13. The Sicilian Waitress (2:19)
  14. A Walk Around Ischia (3:32)
  15. The Stolen Photos (0:42)
  16. Wendell & Pamela (2:00)
  17. Suite 121-122 (5:11)
  18. Permesso? (1:10)
  19. Coffee And Croissants (0:56)
  20. A Bruial Front The Sea (1:50)
  21. Finale (1:19)
  22. Main Title (Alternate) (1:59)
  23. Outtake 1 (1:12)
  24. Outtake 2 (0:33)
  25. A Walk Around Ischia (Alternate) (3:30)
  26. Intro (Alternate) (0:16)
Duración total: 55:22 minutos
Compositor: Carlo Rustichelli
Sello: Quartet Records
Formato: CD
Fecha de lanzamiento 10 de Octubre de 2010
Avanti!